Todas las personas usuarias de Twitter somos responsables de los contenidos que divulgamos, incluidos los retuits.
Leo una noticia que me llama la atención. Un usuario de Twitter divulga una noticia con el siguiente texto:
“Esta chica es Montaña García y es vecina de Cáceres. Acaba de ganar las Olimpiadas de Física de 2018, pero como no es futbolista y no se dedica a los realities no la verás en ningún medio de comunicación”.
Pues bien, ni la chica se llama así, ni es de Cáceres y tampoco ha ganado ningún premio de Físicas. Es todo falso. Es una actriz porno.
Cuando escribió este tuit solamente tenía solo 590 seguidores y no obstante obtuvo 14.000 retuits y 21.000 “me gusta”. Esto demuestra la gran facilidad con la que una noticia (verdadera o falsa) puede divulgare por la red de microblogging.
Así que hubieron 14.000 perfiles de Twitter que retuitearon esta noticia sin comprobarla, incluso lo hicieron dos famosos periodistas cuyos nombres no voy a citar.
Los me gusta, vale. Puedes dar me gusta a un post por muchos motivos. Pero al retuitearlo estás validando el contenido y divulgándolo.
Mi recomendación es que antes de retuitear, por supuesto habría que leerlo, contrastar su veracidad y luego retuitear; en caso contrario estaremos colaborando a la difusión de bulos y fakes por la red, en este caso vía Twitter.
Así pues, y resumiendo, hay que leer y contrastar antes de retuitear para no participar en la divulgación de bulos. - tuitéalo
No está de más recordar la responsabilidad jurídica por retuitear algo.